MATRIMONIOS Y ALGO MÁS

En la útlima semana de octubre, dos rubias con su plata, bastante conocidas en nuestra farándula experimentaron dos momentos muy distintos: una se casó en medio de gran expectativa y la otra recibió una dosis de su propia medicina en España.

Hablemos primero de Gisela Valcárcel, que el pasado sábado 28 de octubre volvió a unirse en matrimonio, esperemos que esta vez sea en forma definitiva.

Ella y el ejecutivo de Frecuencia Latina, Javier Carmona, por fin formalizaron su relación amorosa.

Lo que llamó mi atención es que la prensa farandulera considerara a esta boda como el acontecimiento del año.

La señito hace más de un año que no está en pantalla, y aún así sigue atrayendo la atención de gran cantidad de curiosos.

Y eso que esta vez la ex reina del mediodía cumplió su palabra de hacer de esta ocasión una celebración con su familia y amistades, y no el circo que organizó la vez que se casó con Roberto Martínez.

La otra cara de la moneda la protagonizó Laura Bozzo, quien viajó a España a promocionarse y ver si por fin consigue chamba.

En México fue mucho ruido y pocas nueces, pues lo de Televisa no pasó de ser un simple rumor.

Pero la autoproclamada abogada de los pobres fue por lana y salió trasquilada. En un programa de TV español, le hicieron un callejón oscuro, muy similar a los que ella gusta de hacer a sus invitados.

La verdad, esa emisión de ¿Dónde estás Corazón? (el espacio de Antena 3 donde fustigaron a la Bozzo) debería ser comprada por algún canal local, pues sería una justa redención para todos los peruanos ver cómo le dan su catana a Laura.